La llamada Ley Helms – Burton no detendrá la actualización de nuestro socialismo ni su vocación internacionalista.
Un rechazo patriótico ha provocado en nuestro pueblo cubano la activación del título lll de la Ley Helms – Burton a mediados de mayo pasado como parte de una escalada de agresiones de la administración de Donald Trump para hacer claudicar a nuestra Revolución de sus principios.
A lo largo de 60 años una vez más se equivoca un Presidente del gobierno de los Estados Unidos y sus asesores de política externa con Cuba.
No han aprendido la lección de que esta es una Revolución genuina, del pueblo, por el pueblo y para el pueblo cubano. Ninguna ley extraterritorial, ningún chantaje, ninguna agresión, podrá cambiar la voluntad popular ratificada en la nueva Constitución de construir el socialismo en Cuba.
Igualmente defenderemos el derecho a ser internacionalistas bajo la defensa de los principios del derecho internacional que el imperialismo yanqui pretende ignorar y sobre esa base se sustenta el apoyo a la legítima Revolución Bolivariana con su Presidente Nicolás Maduro Moros.
La Ley Garrote como hemos llamado a la Helms – Burton está en vigor desde 1996 y pretende en el articulado de sus cuatro títulos derrotar a nuestra Revolución y hacernos regresar al pasado oprobioso del capitalismo neocolonial y servil que vivimos en Cuba.
No habrá aplicabilidad de esta ley en Cuba, ni de ninguna otra, con similar carácter mientras exista la Revolución cubana y un pueblo entero este dispuesto a defenderla como sea necesario. En lo jurídico la Ley 80 es la expresión de nuestra voluntad de no aceptar tal imposición.
A su vez la comunidad internacional que viene rechazando año tras año en la ONU la fracasada política genocida del bloqueo del gobierno de los Estados Unidos hacia Cuba se ha vuelto a pronunciar en contra de estas últimas medidas.
Cuba no está sola señores imperialistas, como ha señalado nuestro Presidente de los Consejos de Estado y Ministros Miguel Díaz Canel – Bermúdez no nos detendrán, ni distraerán de nuestra marcha por actualizar nuestro modelo socialista.
Corresponde en ese magno propósito a la comunidad universitaria un rol protagónico aportando profesionales cada vez más revolucionarios, pertinentes y competentes con los ámbitos de su desempeño.
La universidad cubana representa hoy una potencia de ciencia, innovación y desarrollo inagotable, resultado de la propia obra de la Revolución. Con su inteligencia y sus valores está contribuyendo a identificar las reservas internas que poseemos para el pleno despliegue de las fuerzas productivas en alianza con otras instituciones que crece impulsada día a día de forma exponencial.
Los jóvenes universitarios de estos tiempos escribieron y escriben páginas hermosas en los días de las honras fúnebres de Fidel, en la recuperación ante los fenómenos meteorológicos y muchas tareas de gran valor social. Esta juventud no fallará de conjunto con el destacamento revolucionario de varias generaciones precedentes.
¡La Ley Helms – Burton no pasará!
¡Viva Cuba!
Autor: Dr. C. Rafael Emilio Cervantes Martínez
Director Nacional de Marxismo-Leninismo- Historia
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