Centro de aislamiento desde el 7 de septiembre, la Universidad de Ciego de Ávila ha cambiado su rutina docente y científica para convertirse en un hervido de batas verdes y blancas, de jóvenes caminando apurados y siempre ayudando, de hombres y mujeres que separados de sus familias hacen de la valentía una forma de vida.
Los domingos han dejado de ser días de descanso para convertirse en agitadas jornadas donde sin descuidar la atención a los pacientes sospechosos del Covid -19 ,los trabajadores de servicio y otros que se suman ,trabajan en el mantenimiento y el embellecimiemto de las áreas comunes de la Casa de altos estudios de Ciego de Ávila.Fue esa la realidad vivida el pasado día 4,cuando la tropa dirigida por Manolín,Jefe de Servicios, dejó limpias las áreas de los parqueos exteriores, la parada de guaguas, garitas y los canales de drenaje hidráulico, resultado del sentido de pertenencia hacia este lugar de todos.
Codo a codo con la tropa estuvo el Rector de la Universidad de Ciego de Ávila DrC. Yurisbel Gallardo Ballat,quien aprovechó la oportunidad para reconocer el trabajo de los compañeros, hecho que se extendió a los post publicados por el directivo en redes sociales.
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