Más de 37 días sin reportar casos del nuevo coronavirus podría ser razón suficiente para que Ciego de Ávila, junto al resto de las provincias del país excepto La Habana y Matanzas, pasen a la segunda etapa en el cronograma que pretende que el país vuelva a la “normalidad” tras casi cuatro meses sufriendo los embates de una pandemia que en el planeta ha afectado a casi 11 millones de personas y causado la muerte de más de 500 mil de ellos.
En la Revista Especial que cada día transmite Televisión Avileña para actualizar en torno al comportamiento del nuevo coronavirus en la provincia, el director provincial de Salud Pública, Osvaldo Ivañez González, explicó que se mantienen medidas como la prohibición de entrada de trabajadores con síntomas de infecciones respiratorias a los centros laborales y se continuará realizando la desinfección de las manos y las superficies en los espacios públicos con la solución de hipoclorito, así como se mantendrá el uso del nasobuco en lugares donde exista aglomeración de personas.
“Se reestablecerán los servicios hospitalarios a un 75 porciento de su capacidad total, al igual que la atención estomatológica, sin embargo, se logrará completar el total de ellos paulatinamente y en la medida que se vaya retornando a la normalidad, así mismo se intensifica la pesquisa activa en las áreas de salud, sobre todo en lugares donde han existido focos o eventos de transmisión local”, dijo.
Que no se reporten casos del SARS-CoV-2 en Ciego de Ávila no significa que no se estén realizando exámenes PCR a personas sospechosas de portar el virus, pues, según Ivañez González, cada día se toman entre 50 y 80 muestras de exudados nasofaríngeos que luego se procesan en laboratorios de Villa Clara para que en caso de detectarse algún caso positivo se logre cortar a tiempo la cadena de contagios.
Las medidas para retornar paulatinamente a la normalidad incluyen aspectos como la transportación. En el caso de la intermunicipal, se flexibilizan algunas normas para el traslado de pasajeros y en el interprovincial, se reanuda las rutas a partir del próximo 8 de julio hacia todas las provincias del país, excepto La Habana y Matanzas, que aún permanecen en la primera fase de recuperación.
Carlos Luis Garrido Pérez, presidente del Consejo de Defensa Provincial, explicó que, como parte de las acciones que se llevan a cabo para retomar el desarrollo económico de la provincia, a partir de hoy se permite la entrada de turistas internacionales a la cayería norte con los correspondientes protocolos que garanticen la seguridad de los viajeros y así evitar cualquier riesgo de contagio.
“Para ello se capacitó a todo el personal de servicio sobe cómo actuar durante esta etapa para garantizar el cumplimiento de las medidas de higiene necesarias, se realizarán exámenes PCR a los viajeros y se readecua el tratamiento laboral para el personal de atención, quienes permanecerán aislados durante siete días, luego de culminar su jornada”, añadió.
El presidente de Consejo de Defensa Provincial alegó que, a pesar de la contingencia del nuevo coronavirus, la provincia no renuncia a la producción de alimentos, no solo al demandado por el consumo social, sino también a las cantidades necesarias para mantener los compromisos con el balance nacional.
Por ello, se desarrolla la campaña de primavera que hasta hoy ha permitido sembrar 12 mil de las 15 mil hectáreas pactadas con maíz y cultivos de ciclo corto. Sin embargo, esos números y sus correspondientes cosechas son insuficientes para satisfacer la demanda de la población, máxime si se tiene en cuenta que los rendimientos avizorados y explicados por la periodista Katia Siberia en un reciente artículo publicado en Invasor, deja claro que los recortes de un paquete tecnológico cada vez más amenazado por las limitaciones financieras del país, ayuda a entender el asunto y a atenderlo.
Por ello la máxima dirección política de la provincia exhorta a manejar el enfoque popular en la producción de alimentos y rescatar la agricultura urbana y suburbana. Así mismo, Garrido Pérez fue categórico cuando ejemplificó con a penas dos productos, el arroz y la carne de cerdo, la situación por la que transita la provincia, que no dista de la de otras regiones de Cuba.
“Al menos hasta que termine este año no se expenderá la carne de cerdo en la red de comercio minorista a 16 pesos la libra, ni el arroz liberado, debido en el primer caso a las dificultades que persisten en la adquisición de alimento animal en el mercado internacional, para lo que ya se implementan alternativas por parte de los productores para asumir ese déficit. Mientras, el arroz de la canasta básica está garantizado, sin embargo, no se cuenta con disponibilidad para la venta librada de este en los mercados pertenecientes al Grupo Empresarial de Comercio”.
Toda esta situación conllevó a que la dirección de la provincia acordara regular los productos que se comercializan en las Mercados Agropecuarios Estatales por la libreta de abastecimiento en los municipios de Ciego de Ávila y Morón, como una alternativa para llevar a las personas estos productos tan demandados por la población.
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