Por acceso abierto a la literatura científica (Open Access, OA) se entiende su libre disponibilidad en Internet, permitiendo a cualquier usuario su lectura, descarga, copia, impresión, distribución o cualquier otro uso legal de la misma, sin ninguna barrera financiera, técnica o de otro tipo.
Las tres declaraciones de ámbito internacional más importantes que apoyan y definen el open access (acceso abierto) son:
- Declaración de Budapest (Budapest Open Access Initiative, BOAI) de 2002
- Declaración de Bethesda (2003)
- Declaración de Berlín (2003)
La Declaración de Budapest estableció las dos principales vías para el acceso abierto:
La vía verde o vía de autoarchivo: se basa en la práctica de depositar en un repositorio de acceso abierto los trabajos previamente publicados.
La vía dorada: que consiste en que el editor de una revista publica los trabajos en acceso abierto de manera inmediata y perpetua en el tiempo, bajo una licencia en la que el autor mantiene el copyright. Normalmente lleva consigo que el autor paga a la revista para que el artículo esté en acceso abierto.
A estas vías tradicionales se les suman otras variantes que han surgido con posterioridad:
Vía bronce: hace referencia a artículos que son de libre lectura en las páginas de los editores, pero sin una licencia abierta explícita que permita su distribución y reutilización.
Vía diamante o platino: se refiere a las revistas que publican en acceso abierto, y que no cobran a los autores por publicar ni a los lectores por leer. Son revistas que generalmente están financiadas por instituciones académicas o gubernamentales, o por sociedades científicas.
Las instituciones científicas y los autores aumentan inmediatamente la visibilidad de los resultados de su investigación. Se incrementa la difusión y el uso de los mismos, logrando un mayor impacto y abriendo el camino a nuevas oportunidades y fuentes de financiación.
Los investigadores ahorran tiempo en las búsquedas de recursos a los que no pueden acceder a través de sus instituciones a menos que haya suscripción.
A las entidades financiadoras de investigación, universidades y centros de investigación les permite hacer un seguimiento de la calidad y transparencia del proceso investigador y del retorno de la inversión en investigación.
Las bibliotecas pueden ofrecer a sus usuarios acceso a más materiales académicos, optimizando la inversión del presupuesto y permitiendo dedicar parte del mismo a una adecuada inversión en infraestructuras tecnológicas. Esto les brindan la posibilidad de asumir nuevos roles como proveedores de servicios de acceso abierto y como asesores de las nuevas formas de comunicación científica y académica.
Los editores que adoptan el acceso en abierto obtienen una mayor visibilidad de sus publicaciones. Sus modelos de negocio se hacen más transparentes, están más abiertos a nuevas oportunidades y se centran en proveer nuevos servicios de valor añadido para la comunidad.
Ventajas de la publicación en acceso abierto
- Mayor visibilidad, uso e impacto: los documentos depositados en repositorios pueden ser recuperados por más buscadores y proveedores de servicios. Al ser leídos por un mayor número de investigadores, los trabajos obtienen mayor número de citas y por tanto aumenta su impacto.
- Mayor garantía de preservación: puesto que la preservación es uno de los objetivos de los repositorios institucionales.
- Mejor protección contra el plagio. Mayor reconocimiento del autor como tal al ser difundido y citado su documento.
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